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Declaración de la Coalición por la Igualdad de Derechos

Martes, 15 de mayo de 2018

Los Estados miembros de la Coalición por la Igualdad de Derechos que suscriben, reciben con satisfacción los recientes acontecimientos globales y nacionales que buscan poner fin a la práctica de exámenes anales forzados, dirigidos a hombres homosexuales y bisexuales y a mujeres transgénero, en razón de su orientación sexual o identidad de género real o percibida. Los miembros de la Coalición también observan con profunda preocupación que hay personas aún obligadas a someterse a tales exámenes.

Los Miembros de la Coalición reconocen a los organismos internacionales de derechos humanos y de la salud que han condenado dichos exámenes, entre ellos: la resolución de octubre de 2017 de la Asamblea General de la Asociación Médica Mundial; las múltiples declaraciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), tales como la declaración del Día de los Derechos Humanos del Director General de la OMS, de diciembre de 2017; la declaración de 2016 del Grupo Independiente de Expertos Forenses , la declaración conjunta de 12 Agencias de Naciones Unidas en 2015; y las conclusiones del Relator Especial sobre la tortura y otros tratos o penas crueles, inhumanos o degradantes, y del Comité contra la Tortura.

Los Miembros de la Coalición también saludan los progresos realizados a nivel nacional para  la defensa de la dignidad humana y poner término a la práctica de exámenes anales forzados. Entre estos progresos se incluye la sentencia de la Corte de Apelaciones de Kenia de marzo de 2018 que condena como violación a la Constitución de Kenia el sometimiento a exámenes anales forzados de hombres presumidos de ser homosexuales. Asociaciones médicas nacionales en el LíbanoTúnez y Kenia también han criticado la práctica y han instado a que se descontinúe.

Los Miembros de la Coalición llaman a los gobiernos a poner término a la práctica de exámenes anales forzados en base a la orientación sexual o identidad de género real o percibida de las personas. Los Miembros de la Coalición alientan a las Naciones Unidas y a otras organizaciones internacionales a proporcionar asistencia técnica según se requiera para ayudar a los gobiernos a poner fin a esta práctica inhumana.

Países que suscriben:

Albania, Alemania, Argentina, Australia, Austria, Bélgica, Cabo Verde, Canadá, Chile, Dinamarca, Eslovenia, España, Estados Unidos de América, Estonia, Finlandia, Francia, Grecia, Islandia, Italia, Lituania, Luxemburgo, Montenegro, Noruega, Nueva Zelanda, Países Bajos, Reino Unido, República Checa, Serbia, Suecia, Suiza, Uruguay.